18 feb 2011

Ojala todos los días pudiera llegar con un regalo; ojala cada día tuviera algo maravilloso que decirte, algo para compartir que te hicera sentir la ilusión que tengo puesta en este puente que se va prolongando con cada pensamiento puesto en ti. Ojala.
La mayoría de los días traen pequeñas cosas que, a veces, aún estando y existiendo, ni me doy cuenta de que han llegado si no me detengo a contemplar el día con calma. Si no lo hago así, puede que pasen, que hayan existido y no las hayas visto.
Pero hay días ¡FABULOSOS DIAS! en los que encuentro algo de forma tan evidente que es imposible no verlo. Hoy ha sido uno de esos; hoy, que empezó realmente anoche, me ha traído un regalo de la mano de María. Por ella he conocido a una cantante maravillosa del más puro estilo de jazz negro ¡y me ha encantado!
Como muestra vale un botón y por eso te dejo aqui este enlace, para que disfrutes de Esther Philips y lo hagas recordando que te quiero y solo espero que a ti no te importe amarme.


Pero ya ves lo que son las cosas; encontrar a esta cantante ha hecho que vuelva hacia otra que ya conocía hace tiempo y que casi tenía olvidada. Dinah Washignton. Y te dejo una canción de ella que me apasiona y suelo cantar (jeje). Para mí es la mejor versión que se ha hecho de este tema y lo que dice es...lo que quisiera decirte a ti constantemente.


¡Dios! ¿Hoy es día de recrearme con canciones maravillosas o qué? Ahora he encontrado a Brenda Lee y a pesar de que sus canciones son concídisimas, yo no conocía su nombre. Sí cariño, soy una inculta musical de mucho cuidado. Pero, nunca es tarde para empezar a cultivar algo que amas ¿no crees?







No hay comentarios:

Publicar un comentario